Historia del puchero valenciano

La paella no es el único plato dentro de la gastronomía valenciana, hay una gran variedad de recetas entre la que se encuentra el puchero valenciano.

 

Esta versión del cocido madrileño es uno de los platos más comunes en invierno en la Comunidad Valenciana, aunque no todo el mundo sabe con certeza que es.

 

Normalmente se suele comer cuando se reúne la familia, al igual que ocurre con la paella, y aunque su proceso de elaboración es parecida a la del cocido madrileño, no tiene nada que ver uno con el otro. La diferencia se encuentra en los ingredientes.

 

El cocido madrileño lleva garbanzos, carne de cerdo, vaca y gallina, tocino, patata y verduras como el repollo, la chirivía, la carlota y el cardo. Por otro lado, el puchero valenciano lleva pilotes, blanquet y arroz.

 

Estas pelotas que se les echa al puchero valenciano se elaboran a partir de carne de cerdo, pan rallado, piñones, perejil, pimiento, huevo y una pizca de limón. Se hierve junto al resto de ingredientes en el caldo, donde también se encuentra el blanquet.

 

Este embutido es típico de la Comunidad Valenciana, y también suelen llamarle morcilla blanca. Se hace con magro entreverado de cerdo, huevo, piñones y especias.

 

Cuando el caldo está listo, primero se toma la sopa sola, luego los garbanzos junto a la verdura y, finalmente, la carne. Tradicionalmente, la sopa suele llevar arroz, aunque hay hogares que prefieren echarle fideos.

 

Siempre ha sido un plato de comer los domingos, pues entonces habrían platos derivados de las sobras de este como el arroz al horno o croquetas de puchero.


Si eres valenciano, seguro que durante estas fiestas has comido puchero algún día, ya que es uno de los platos más comunes en estas fechas tan señaladas.

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